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La exportación y comercialización de conservas: un sector de éxito
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Los productos españoles gozan de un reconocimiento en el exterior cada vez más positivo. Las cifras de exportación de todo tipo de productos y servicios son cada vez más elevadas, y parte importante del crecimiento económico sostenido que está consiguiéndose se basa en ello. De entre todos los sectores, destaca el sector conservero, ya que la comercialización de conservas a otros países crece casi a doble dígito. Por tanto, la exportación y comercialización de conservas se convierte en un sector de éxito.

El mundo se rinde al atractivo de las conservas y alimentación no perecedera españolas

Si bien el sector de la alimentación no perecedera engloba otros tipos de alimentación que no son conservas, son estas las que han impulsado las exportaciones en los últimos años. Según cifras de la patronal española de conservas de pescados (Anfaco-Cecopesca) durante el año 2017 se exportaron a otros países una cantidad que supera las 110.000 toneladas de productos conserveros, con un valor en el mercado de casi 600 millones de euros.

España está en el TOP 5 de países exportadores de conservas y eso no es por una cuestión de azar. La conserva española goza de una gran consideración a nivel europeo y son muchos los países que importan conservas españolas. Italia y Francia son los dos principales importadores, pero nuestras conservas dan la vuelta al mundo llegando a países como Japón o Chile.

¿Cuáles son los motivos de este auge?

Atún, mejillones, anchoas o caballas son algunos de los productos en conserva con más éxito internacional. El atún es el producto estrella con casi el 70% de las exportaciones según Anfaco. En conjunto, en el año 2017 el sector exportó un 9,1% más respecto al año anterior, entre los que no podemos olvidar los reconocidos productos en salazón.

Según explican desde la propia patronal, el consumidor extranjero valora la calidad de la conserva española, especialmente la envasada en aceite de girasol, por tratarse de un producto elaborado de forma artesanal y que, sin embargo, goza de un sabor adecuado para los paladares más exquisitos. Además, el creciente número de españoles que viven en el extranjero ha impulsado el reconocimiento de estos productos, típicos de la gastronomía española, tan reconocida en los países europeos y americanos, sobre todo.

Las marcas del sector han sabido atender las demandas de un consumidor cada vez más exigente y más preocupado por los ingredientes de los alimentos que consume, y que ha encontrado en las conservas un producto saludable y tradicional. Además, las nuevas variedades, como las conservas bajas en sal, han tenido una gran aceptación por todo tipo de público, especialmente personas de edad y deportistas.

La internacionalización de los productos españoles como motor de crecimiento

Las empresas conserveras nacionales están inmersas en procesos de internacionalización de sus productos dentro de sus estrategias comerciales. Llegar a cada vez más destinos y con más variedad de productos, sin duda, es una oportunidad de crecimiento para el sector y una forma de sobrevivir de forma robusta a las posibles crisis económicas.

Las grandes marcas y también las que quieren serlo están apostando por el I+D+I y por la internacionalización como una forma de modernizar un sector que disfruta de una producción artesanal, pero que necesita abrirse al mundo para poder sobrevivir y generar más nivel de negocios y empleos.

El apoyo de la patronal y las instituciones al sector es fundamental, al igual que los servicios de asesoría y consultoría que muchas empresas conserveras están utilizando para dar el salto internacional que necesitan. Y es que la exportación es una oportunidad que ninguna empresa de alimentación no perecedera debería dejar pasar, ya que el mundo demanda productos españoles y solo quienes apuesten por ofrecerlos lograrán beneficiarse de ello.

Este es un privilegio del que otros países no gozan, y es una tendencia estable en el tiempo con un crecimiento sostenido. La comercialización de conservas en el exterior ha sido la palanca que ha impulsado el crecimiento de muchas pequeñas y medianas empresas del sector de las conservas, y es que en todo el mundo, pero especialmente en Europa, sienten una gran admiración por las conservas españolas.

Por ello, para garantizar tu éxito, debes confiar en los mejores profesionales para que te asesores sobre cómo internacionalizar tus productos con éxito. Conocer el mercado, cuáles son las oportunidades de cada producto en cada país y cómo conseguir el mejor posicionamiento de su empresa, son algunos de los puntos clave que se conseguirá con OFTEX.

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Foto cedida por Hortidesa-Delicias Vegetales

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