Una vez más la realidad nos desmonta un mito y nos da un argumento más para darnos cuenta que España es mucho más que sol, jamón y rojo pasión. Está claro que no sólo exportamos productos sino también una imagen y una forma de vida y es en esa línea donde se mueven las exportaciones que, podríamos pensar, son las que tienen más volumen entre los dos países.
El valor de las exportaciones de jamón a Japón, dentro de la partida 02 (cuya prohibición se levantó en 1999), han rondado entre el tercer y el quinto puesto en el ranking de partidas arancelarias en los últimos siete años, pasando de representar en torno al 5% de las exportaciones a Japón en 2011 a casi el 13,06% en 2016, un aumento del 100% para una de las insignias de nuestra gastronomía, pero no lo suficiente como para ser lo que más exporta España a Japón.
Entonces, ¿qué es lo que más se exporta en valor a Japón? Las dos partidas que exportan más producto de España a Japón son la 30, que son fármacos y la 87, que son los automóviles y son estas dos partidas las que nos muestran que España forma parte de un mercado global en el que varios países entran en juego para dar un mejor precio y producto al cliente final, en este caso al japonés.
Lo que no hay que olvidar es el innegable ascenso del monto total de las exportaciones. En 2014 se hicieron operaciones con el país nipón por valor de 2.600 millones, mientras que en 2016 se superaron 580.000 millones de euros, lo que demuestra que los productos españoles en Japón están teniendo un protagonismo cada vez más preponderante.
El sector farmacéutico en España es una actividad de la que no se habla mucho, pero que, junto al químico, es el sector industrial español de mayor productividad.. Hay dos razones principales, mientras otros sectores deslocalizaban sus plantas de producción, las grandes corporaciones farmacéuticas y las compañías de capital español apostaban por renovar, ampliar e invertir en sus centros de producción españoles. El motivo primordial de este hecho es estratégico y reside en el capital humano y en la calidad de la I+D+i patria.
Así, la tecnificación de los trabajadores especializados españoles junto a la rebaja en los costes laborales ha propiciado el caldo de cultivo perfecto para que muchas de las plantas de producción farmacéutica vivan ahora una segunda juventud.
La segunda razón es que muchas multinacionales se han trasladado a nuestro país como Lilly, Roche, Pfizer o Bayer y otras que ya estaban establecidas aquí, como Boehringer-Ingelheim, Sanofi o Merck han decidido aumentar la capacidad de sus plantas. Las grandes empresas españolas del sector como Almirall, Grifols (en el IBEX 35), Cinfa, Kern o Rovi han sido las primeras en constatar el éxito del patrón, al mantener sus centros de producción en España que alternan sus esfuerzos comerciales entre el mercado nacional y el de allende de nuestras fronteras para elevar sus ratios de competitividad.
Novartis, con sus cinco centros de producción en Barcelona y los tres centros de su filial Sanofi para genéricos, los cinco centros del laboratorio catalán Ferrer, los dos centros de Boehringer-Ingelheim y la sede del mayor laboratorio español y con más presencia intenacional, Grifols, hacen de Cataluña el centro del sector farmacológico español. No hay que olvidar la presencia de Lilly, Merck y Pfizer en Madrid, donde Alcalá de Henares, Alcobendas, Leganés, Tres Cantos, Azuqueca (en Guadalajara) son sedes de estos grupos entre otros, como, Rovi, Roche, GSK y Chemo. También hay que resaltar el desarrollo de Cinfa en Navarra.
La apuesta de empresas españolas y otras multinacionales por la producción en España va aparejado al aumento de la esperanza de vida y el cuidado por la salud en Japón, lo que ha supuesto que el flujo de medicamentos entre estos dos países sea en que más valor monetario representa flujo de medicamentos también va a la par de una de las tendencias más importantes del sector farmacéutico, la preponderancia de los genéricos: tanto España produce genéricos, como Japón los consume.
La población japonesa, además, está envejeciendo y se calcula que en el año 2020 habrá más población anciana que infantil y tradicionalmente siente interés por mantener un buen estado de salud. En los últimos años, los cambios en los hábitos de la sociedad han hecho que esta preocupación aumente.
Si estás interesado en exportar hacia Japón, es fundamental que cuentes con un buen equipo de asesoramiento y con presencia en España que pueda acompañarte durante todo el proceso. Contar con una asesoría de exportación como Oftex dinamizará los pasos para la internacionalización a este país con tantas oportunidades.