Português
Italiano
Français
English
Deutsch
Tres han sido las ciudades que gracias a la actividad hortofrutícola han alcanzado un total de facturación de los 6.000 millones de euros. Estas son Murcia, Alicante y Almería, así confirman las cifras de estudio del pasado año en la Cámara de Comercio. Lo que supone nada más ni menos que un 42% de las ventas sectoriales a nivel nacional. Esto supone llegar a cifras tan positivas como los 14.000 millones de euros.
Unidas han llegado a encabezar la exportación española de frutas y hortalizas con 17.500 millones, lo que se ve reflejado en un 6,8% del total nacional. Cifras que pueden llegar a considerarse suficientemente relevantes para tener en cuenta todas aquellas infraestructuras necesarias para que las exportaciones puedan darse lugar, y así que todo el volumen de mercancías puedan salir por agua, tierra o mar.
Vamos a hilar más detalladamente que se exporta en cada ciudad.
Murcia es la ciudad que ocupa la primera posición en la lista de exportaciones hortofrutícolas nacionales, superando los 9.ooo millones de euros. Además de este sector, la ciudad también es muy conocida por su exportación de manufacturas de fundición, acero, hierro y metales comunes.
El segundo puesto de esta lista lo ocupa Almería con exportaciones por valor de 3.391 millones de euros, cuyos productos más comercializados son las hortalizas, llegando a los 2.169 millones, y seguido de frutas con 340 millones. Sin lugar a dudas, la producción y distribución de estos productos hortofrutícolas se convierten en la locomotora exportadora de la ciudad.
Alicante conforma el tercer puesto en la lista de ciudades exportadoras, aunque su actividad hortofruticola, dentro de la ciudad, se considera el segundo sector exportado, por detrás de la industria del calzado, que sigue aumentando favorablemente año tras año, según indica la Cámara de Comercio. La ciudad se enriquece también de exportaciones como en el sector del juguete con casi 150 millones y curiosamente de la extracción de piedra natural con 300 millones. Esta última presenta una gran incidencia en la economía alicantina. Todo gracias a la cantidad de canteras que dispone la provincia, en dónde se extraen variedades de mármol de reconocimiento nacional.
