Puntos clave en la Internacionalización de las Empresas Españolas

Abrirse al mundo y triunfar ha sido para muchas empresas consolidadas un complejo y satisfactorio proceso. El hecho de tener en cuenta diversos factores que ayuden a cuidar la estrategia de internacionalización de una empresa madura, ha requerido de cuantioso trabajo de  investigación, análisis e interpretación de los datos de sus nuevos mercados. Pero sobre todo, comparten un denominador en común, contar con un buen asesoramiento desde el inicio de su proceso de exportación.

Nuestra amplia experiencia en este sector acompañando a potentes marcas como Agatha Ruíz de la Prada, Actiu, Grupo leche Pascual, Porcelanosa o Energy Sistem entre otras muchas, nos han proporcionado la experiencia y conocimientos clave para mostrarte cómo debe internacionalizarse de manera ejemplar tu empresa y obtener grandes beneficios con ello.

1.     Analízate

El primer paso a seguir para embarcarse en este proceso, es analizarte a ti mismo. Para ello, deberás detectar cuáles son los puntos fuertes y débiles de tu compañía.  Es decir, mediante el conocido análisis DAFO, deberás ser capaz de identificar todas las oportunidades que presenta tu empresa en el ámbito internacional y aquellas debilidades frente a él.

Nunca pierdas de vista las acciones de tus competidores y sus productos, dado que con el más mínimo descuido podrían llegar a ganarte cuota de mercado o incluso sustituirte en él. Ten muy presente cuál es el potencial exportador de tu empresa, gracias al conocimiento previo del mercado al que quieres exportar con datos referentes a trámites aduaneros, documentación necesaria, datos económicos y demográficos… que puedes encontrar en el ICEX, la Cámara de Comercio o en compañías privadas dedicadas a su recopilación.

2.     En qué lugares tus fortalezas se pueden convertir en oportunidades

Aprovecha tus puntos fuertes y conviértelos en oportunidades. ¿Cómo hacerlo? Investigando diferentes países en los que estés interesado exportar y observando la demanda de productos españoles en sus mercados.  Un dato esencial que te ayudará a conocer las ventas de cada país y a enfocarte mejor al mercado dónde tu producto obtendrá más beneficios.

Cuanta más información recopiles, menor será la incertidumbre a la que estés sometido. Por tanto, además de las ventas, investiga sobre los aranceles, los acuerdos comerciales y todo aquello relevante que debas conocer antes de ponerte a exportar.

3.     ¿Cuál es la inversión?

Los costes del proceso muchas veces son los que impiden a una empresa dar el gran salto.  Es recomendable que hagas un estudio de lo que llegaría a costarte, utilizando herramientas dónde puedas ver los gastos que te supondrá toda la exportación y ver la viabilidad de la operación.

Una ayuda para no dejar en “Stand by” el proyecto es contar con inversores o socios potenciales del país al que deseas implantar tu negocio y que apuesten por tu internacionalización.

4.     Consigue financiación

Analiza cada una de las diversas formas de financiación de las que disponga tu empresa y estudia cuál será la más viable para tu propuesta. Deberás plantearte, por ejemplo, conocer con qué tipo de interés querrías financiar, si con los de operaciones con o sin el certificado de liquidez.

5.     Consigue asesoramiento

Es fundamental que te asesoren en tu internacionalización. Porque contar con una empresa externa especializada en el sector de la exportación y que te asesore personalmente sobre las alternativas que existen para el proceso te ayudará a ahorrar en tiempo y dinero. Además, te guiarán en todos los trámites que deberás llevar a cabo como las estrategias, los datos sobre los mercados, la financiación internacional, la existencia de los programas de apoyo, etc.

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